América Latina es una de las regiones que más está sufriendo la crisis económica derivada de la pandemia del SARS-CoV-2. Así lo atestigua la cantidad de empleos que se han perdido desde que este virus se propagó por la región. Según las últimas estimaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) divulgadas ayer, 23 de septiembre, un total de 1.000 millones de empleos de tiempo completo se perdieron a escala global en lo que va del año. En el continente americano, esta cifra suma 191 millones de puestos de trabajo de 48 horas semanales, de los cuales 149 millones (un 78%) se habrían perdido en América Latina y el Caribe.
De esta forma, la pandemia deja detrás de sí una de las peores crisis de empleo ocurridas en la región en las últimas décadas. Entre las subregiones más afectadas se encuentra América del Sur, donde se estima que 39 millones de puestos de trabajo de 48 horas semanales dejaron de existir en el tercer trimestre de este año, tras una pérdida de 50 millones de empleos en el trimestre anterior, tomando como referencia los últimos tres meses de 2019. De julio a septiembre de 2020, Sudamérica fue la segunda región con el mayor porcentaje de horas de trabajo perdidas en todo el mundo, con alrededor del 25%, sólo superada por América Central, cuyas horas perdidas alcanzaron el 30% en el último trimestre, muy por encima del promedio global, que se ubica en un 12%.