Los temores a que las elecciones al Parlament de Cataluña celebradas ayer, 14 de febrero, contaran con un alto índice de abstención debido al miedo a ir a votar en medio de la pandemia se han cumplido. La participación se hundió hasta el 53,54%, el nivel más bajo de la democracia en esta comunidad y 25 puntos por debajo de la registrada hace cuatro años.
El socialista Salvador Illa se ha alzado como el vencedor de la jornada electoral en número de votos. Así, el PSC ha recuperado su presencia en el Parlament, pasando de 17 escaños obtenidos en las anteriores elecciones de 2017 a 33 en estos comicios. Sin embargo, los socialistas han empatado en escaños con ERC, que tiene en su poder la llave para abrir un Govern de corte independentista o de izquierdas. Los partidos que forman el bloque independentista superan el 50% de los votos y suman 74 diputados frente al arco parlamentario no independentista, que alcanza los 61 representantes. Por su parte, Ciutadans pasa de primera a séptima fuerza política tras perder 30 escaños, mientras que Vox irrumpe en el Parlament como cuarta fuerza, con 11 diputados.