El consumo de cigarrillos es un ritual que ha trascendido el tiempo y las culturas. No obstante, en las últimas décadas, el tema del tabaquismo ha adquirido una relevancia significativa y se ha debatido ampliamente debido a su considerable impacto en la salud pública y en la sociedad en general. Aunque la creciente conciencia sobre dicho tema ha dado lugar a una disminución del consumo de cigarrillos en algunos países, otros todavía enfrentan dificultades para abordar su incremento.
Entre las economías representadas en el gráfico, elaborado con datos del Statista Market Insights, destaca el aumento del consumo de cigarrillos en Sudáfrica. Tras una caída sustancial en 2020 debido a una prohibición de cinco meses de la venta de tabaco durante el brote de COVID-19, el volumen per cápita de consumo de cigarrillos ha repuntado rápidamente en la nación africana. En 2022, el consumo promedio alcanzó las 1.763 unidades, lo que representa un aumento del 14% respecto al año anterior.
Por otro lado, China mantiene un número relativamente estable de cigarrillos fumados por persona, con una media de unas 2.000 unidades, mientras que en India se ha observado una disminución en el consumo de un año a otro, una tendencia que se espera continúe en los próximos años.
En Europa, los fumadores están apagando gradualmente sus colillas. En España, el número de cigarrillos per cápita disminuyó un 2%, frente a un descenso de más del 4% en Francia y el Reino Unido. Del otro lado del océano Atlántico, los estadounidenses también están disminuyendo su consumo, fumando un 3,8% menos que en 2021. En Latinoamérica, tanto Brasil como México, principales mercados de la región, registraron un declive en el consumo de cigarrillos, mientras que Colombia y Perú han experimentado un incremento desde la pandemia que, según las previsiones, seguirá en alza en el futuro.