Según el último informe "Engaging with Music" de IFPI, hay varias razones para comprar discos de vinilo que no sólo tienen que ver con reproducirlos. Después de preguntar a los compradores de vinilos de 22 países cuál era la razón principal de la adquisición, la IFPI encontró que el deseo de «poseer físicamente» la música fue la razón más citada, seguida de cerca por el gusto de «tener discos físicos para mirarlos», ambas posibles sin siquiera contar con un tocadiscos en casa. Es cierto que las razones número tres y cuatro, disfrutar del «ritual de reproducir un disco de vinilo» y «sumergirse en un álbum», sí requieren un tocadiscos. Las razones cinco y seis fueron «querer apoyar a los artistas» y «leer las notas internas del disco».
Incluso en la era digital, cuando prácticamente cualquier cosa se puede almacenar y transmitir desde la nube y la industria del streaming de música factura unas cuatro veces más que la venta de CDs, vinilos o casetes, los bienes físicos todavía tienen valor para las personas, ya sea para tocarlos, mirarlos o, claro, escucharlos.