El transporte aéreo en el mundo - Datos estadísticos
Las aerolíneas estadounidenses a la cabeza
En esta realidad ha desempeñado un papel importante Estados Unidos. A fin de cuentas, son las compañías aéreas nacidas en el país de las oportunidades las que cada año lideran tanto en volumen de ventas como en ingresos por pasajero transportado. Es más, los mismos tres nombres se repiten en ambos podios, aunque el orden no sea exactamente el mismo en los dos casos. En cuanto a la facturación, Delta Air Lines y American Airlines tienden a competir por el primer puesto en una batalla que, en 2023, ganó la fundada hace casi un siglo en Georgia como Huff Daland Dusters. En concreto, facturó alrededor de 54.000 millones de dólares, frente a los casi 52.300 millones de su competidor. Si se habla de los denominados RFKs, por su denominación en inglés, ninguna de estas logró la corona en el último ejercicio. Ese honor le tocó a United Airlines, que fue además la única en sobrepasar los 370.000 millones.La nación de las barras y las estrellas cuenta asimismo con el aeropuerto de mayor afluencia de viajeros del mundo. Se trata del Hartsfield-Jackson en Atlanta, que únicamente en 2023 registró un tráfico de más de 104,5 millones de personas. Junto a este, otros cinco se cuelan dentro del top 15. En cuanto al tránsito de mercancías, no obstante, el dominio lo tienen las instalaciones asiáticas. En concreto, seis de los diez principales aeropuertos de carga del planeta se ubicaban dentro de dicho continente en 2023. Pero ¿en cuál de ellos recayó el liderazgo en esta ocasión? La verdad, es que no hubo sorpresas y dicha posición fue, nuevamente, para el Aeropuerto Internacional de Hong Kong, que movilizó un total de más cuatro millones de toneladas. Quizá el hecho de que Asia-Pacífico sea la región con mayor inversión prevista de capital en infraestructura aeroportuaria en el periodo comprendido entre 2021 y 2040, llegando a triplicar la que se espera que se produzca en Europa y Norteamérica —áreas geográficas con algunos de los aeropuertos más transitados a nivel global—, tenga algo que ver dicha superioridad.
La aviación verde ¿el futuro del sector?
Ahora bien, con independencia de la zona del mundo en la que se mira, el mayor problema que presenta la aviación, más allá de los avances que ha supuesto para el transporte, es la enorme huella de carbono que genera anualmente. No por nada, se le atribuye el 3,5% del total de gases de efecto invernadero enviados a la atmósfera. Es más, en 2023, las emisiones de CO2 procedentes de esta industria se estimaron en 1.000 millones de toneladas métricas; una cantidad que, de no tomarse medidas al respecto, podría prácticamente duplicarse en 2050.La aviación verde o sostenible surge precisamente como la alternativa para tratar de reducir esta contaminación y se basa en cuatro componentes: combustibles de aviación sostenibles (SAF), nuevas tecnologías aeronáuticas, tácticas de captura/compensación de carbono y mejoras en infraestructura y operaciones. Es el primero de ellos, no obstante, el que se espera que tenga un mayor impacto en el objetivo del “cero neto”, ya que se prevé que contribuya a reducir en casi dos tercios las emisiones de los aviones. Esto explica que tan solo en 2022, la generación mundial de SAF duplicara la reportada durante el año anterior, alcanzando de esta forma el volumen más elevado de la última década. Cabe señalar, que dentro de estos combustibles alternativos se encuentran los denominados directos neutros y netos en carbono —sintéticos o biocombustibles— y los no directos, como el hidrógeno verde, siendo este en el que mayores esperanzas se han puesto por ahora.