El sector de la puericultura incluye una amplia gama de productos que van desde pañales y toallitas hasta artículos relacionados con la seguridad, el transporte y la alimentación de los bebés. Ahora bien, desde una perspectiva más general, esta industria se puede dividir en dos categorías principales. La primera de ellas es el
, cuyo tamaño ya se situaba por encima de los 89.000 millones de dólares estadounidenses en 2021 pese a la ralentización de su crecimiento debido a la pandemia de COVID-19. La segunda se centra en la fabricación y comercialización de papillas, fórmulas nutricionales y similares. En este caso, los ingresos alcanzaron un máximo histórico en 2021 y se prevé que exista un aumento constante en el próximo sexenio, superando los 381.000 millones de dólares en 2027.
Productos clave dentro del sector del cuidado del bebé
No es desconocido el hecho de que la piel de un recién nacido es sumamente delicada y por ello requiere de una atención especial. Ante esta premisa, son numerosas las marcas dentro de cuidado personal que han extendido su área de actividad a este grupo demográfico. Entre ellas,
Johnson & Johnson ha sido tradicionalmente una de las más reconocidas, con una facturación que a comienzos de la década de 2010 sobrepasaba siempre los 2.000 millones de dólares. Sin embargo, las demandas de decenas de mujeres en Estados Unidos que afirmaban haber desarrollado cáncer de ovarios debido a la exposición al asbesto en el polvo de talco de la compañía impactaron en sus ventas, que han experimentado un decrecimiento generalizado desde 2015. Pero más allá de este caso, la realidad es que las cremas y el resto de los destinados al
cuidado corporal de los bebés siguen moviendo mucho dinero. Solo en 2021, generaron más de 4.000 millones de dólares en todo el mundo, con
China y Estados Unidos como los principales focos de estos ingresos.
Estos dos países también dominan cuando se habla de otro de los productos clave dentro de este segmento: los
pañales. De hecho, en conjunto fueron responsables de más de la tercera parte de las ventas globales de este artículo en 2021, lo que en términos absolutos se tradujo en alrededor de 16.600 millones de dólares. Esto no llama en exceso la atención, aunque ninguno de ellos se encuentre entre los
Estados con mayor tasa de natalidad, si se consideran ciertos aspectos. Por un lado, según un artículo publicado a inicios de 2022, un bebé estadounidense utiliza entre seis y diez pañales desechables al día, lo que en función de la marca puede suponer entre 960 y 1.440 dólares al año de media por niño. Por su parte, el cambio de la política natal por parte del Gobierno chino en mayo de 2021 permite a las parejas tener hasta tres hijos, lo que no significa sino la suma de potenciales consumidores a los ya estimados 30 millones de bebés por año dentro de las fronteras chinas y, por ende, un mayor gasto en la compra de este bien. Así, no parece tampoco demasiado desorbitado asumir que gran parte de los
casi ocho millones de toneladas de pañales usados en el mundo en 2021 probablemente se hayan registrado en dichas naciones.
Alimentación infantil
Muchos estudios pediátricos continúan haciendo hincapié en el papal primordial de la leche materna en la alimentación de los bebés, sobre todo durante sus primeros meses de vida. Sin embargo, las imposibilidades físicas de algunas mujeres para dar el pecho o la dificultad de conciliar la lactancia con la vida laboral en determinadas circunstancias han atribuido a los distintos sustitutos cada vez mayor peso dentro de la nutrición infantil. Es más, el
consumo mundial de comida para bebé no ha dejado de crecer en la última década y todo apunta a que mantenga dicha tendencia, al menos, hasta 2026. Dentro de los nombres propios que han contribuido a este incremento se encuentra
Nestlé. La firma de origen suizo, que ingresó alrededor de 90.600 millones de dólares en 2021, se ha afianzado año tras año como la empresa líder dentro de este subsector. Abbot Nutrition y Danone, aunque a una distancia más que considerable del gigante ubicado en Vevey, cuentan asimismo con una posición de relevancia, con una facturación anual de entre 25.800 y 43.000 millones de dólares. Eso sí, cabe señalar que todas ellas no se centran únicamente en este tipo de nutrición, sino que tienen otras ramas de actividad. Por regiones, y a pesar de que las grandes marcas son en su gran mayoría europeas o estadounidenses, es Asia quien parece dominar, ya que nueve de los diez países que más ingresos generan gracias a este tipo de productos alimenticios se encuentran precisamente dentro de las fronteras de dicho continente.
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